Es una de las tantas flores denominadas “rayitos de sol”, ya que se abre durante las horas de luz, mostrando en ese momento su esplendor. Sumamente rústica, adaptada a terrenos pobres y a la falta de humedad, soporta además vientos fuertes y salitre, lo que la hace indicada para instalar en jardines próximos a la costa. Cada vez hay más cultivares para seleccionar.
Las hortensias son infaltables en los espacios verdes. Preferidas por el tamaño y la profusión de sus flores, y por los escasos cuidados que demandan, se ubican en prácticamente todas las áreas enjardinadas. En la actualidad existen cultivares de menor porte, por lo que su uso en balcones y terrazas también es posible.
Árbol de mediano porte cultivado en parques, plazas y avenidas. Su follaje liviano es particularmente atractivo. Tardíamente caduco en invierno, cuando llega diciembre su espectacular floración precede a la foliación, por lo que en ese momento es sobresaliente. Luego, un inusual pero vistoso manto violeta cubrirá el césped y los pavimentos.
Predilecta de los jardineros y aficionados por su fácil cultivo y su extendido período de floración, la gallardía es una elección adecuada para quienes gustan de los colores llamativos. Se puede cultivar como planta perenne o anual, ya que en muy corto tiempo después de la siembra se obtienen flores. Si se le proporcionan cuidados, estará en flor todo el año.
Sumamente atractivos, muy floríferos, vistosos prácticamente todo el año, los farolitos japoneses son plantas fáciles de cultivar. De rápido crecimiento, siempre cubren en poco tiempo ese espacio que necesitamos llenar en forma urgente. Al atractivo de sus flores, se suma el de las hojas variegadas y disciplinadas en ciertos cultivares.
Es un árbol caducifolio, apreciado por su rápido crecimiento y por sus vistosas hojas y flores. Precisa una adecuada poda de formación y entutorar para lograr los mejores resultados. Es muy fácil de reconocer en invierno, ya que sus largas vainas permanecen mucho tiempo en la planta.
